Bendito mi santo, primer discípulo de Jesús, hermano de Pedro el pescador. Era el día 30 de noviembre del año 2013 y mi cuaderno Cantando por Fandangos llevaba dos meses inactivo. ¿Por qué? Así lo contaba yo en aquella misma fecha, según el texto que les dejo a continuación.
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El año agrícola (1 de octubre, 30 se septiembre) no se dividía en meses sino en "viajás". Cada viajá era un cierto período de tiempo, siempre entre dos fechas señalás, para el cual se contrataba en los cortijos a sus jornaleros. Acabada la viajá, o te contrataban para la siguiente o te ibas a tu casa. La duración dependía de las labores que necesitaban las tierras. Así, la primera del año natural, era de dos meses: te contrataban el día de San Miguel para trabajar desde el 1 de octubre hasta el día de 29 de noviembre. El 30, festividad de San Andrés y final del período, era festivo para las gentes del campo. Tiempo de otoño en el que había que orear las tierras y hacer la siembra del cereal.
Pues bien, esa viajá es la que este cuadernillo dedicado a los fandangos no encontró señorito que lo contratara y por eso ha permanecido en el paro. En la siguiente (de San Andrés a Navidad), si hay más suerte, estaremos de nuevo por aquí. Después, que Dios disponga.
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