Envío al cuasi rondeño Antonio Villarejo Perujo.
Siempre he mantenido que, el magnetismo que conlleva la belleza y el embrujo de la malagueña ciudad de Ronda, provoca que todo el que escucha el adjetivo rondeña lo asocie con ella, pese a que el término rondeña tenga otros usos y otros significados. Así ha ocurrido en el Flamenco, donde existen varios tipos de fandangos rotulados como Rondeñas, que una gran parte de los aficionados comunes los supone como Fandangos de Ronda. ¿No los hay de Graná, de Huelva, de Lucena, etc.?, ¿por qué Ronda, que además ha jugado un papel relevante en la historia del Flamenco, no iba a tener sus propios fandangos? Pues resulta que no, que no existe (que yo sepa) un fandango flamenco que tenga su origen en Ronda. Esta idea la desarrollé en varios artículos de este mismo blog(*) y hoy voy a abundar en ella si bien refiriéndome a sólo una de las varias rondeñas que se cantan en Flamenco.
Se trata de la que todos asociamos a la copla
que grabara en 1954 el cantaor manchego Jacinto Almadén para la llamada Antología de Hispavox. Mucha afición no sólo la ha asociado a Ronda sino que la consideraban la rondeña grande. Tan de Ronda la suponían que la emparentaba con el cante del polo, indicando que ambos casi compartían el primero de sus respectivos tercios.
Por mi parte pensaba y pienso que en la Antología se le llamó rondeña a ese cante porque era cante de rondar, cante para cantar a media noche bajo el balcón de la novia, de la mujer pretendida o simplemente de las mujeres en edad de merecer como antaño se decía. Con otras melodías, cantos de igual temática e intención, los hay por todas las Españas y en todas ellas les llaman rondeñas. ¿Por qué en Andalucía íbamos a ser la excepción de no llamarlos cantes de rondar porque tengamos una población que se llama Ronda? No le demos más vueltas: las llamadas rondeñas flamencas no son sino cantes de rondar.
Se trata de la que todos asociamos a la copla
Navegando me perdí...
Por mi parte pensaba y pienso que en la Antología se le llamó rondeña a ese cante porque era cante de rondar, cante para cantar a media noche bajo el balcón de la novia, de la mujer pretendida o simplemente de las mujeres en edad de merecer como antaño se decía. Con otras melodías, cantos de igual temática e intención, los hay por todas las Españas y en todas ellas les llaman rondeñas. ¿Por qué en Andalucía íbamos a ser la excepción de no llamarlos cantes de rondar porque tengamos una población que se llama Ronda? No le demos más vueltas: las llamadas rondeñas flamencas no son sino cantes de rondar.
Admitido esto, todavía hay quien insiste. Puede haber cantes de rondar que sean unos de Alosno, otros de Arcos, de la Alpujarra, de Andújar o, ¿por qué no?, de Ronda, cosa que ocurriría con nuestro Navegando me perdí. Bueno, y si no de Ronda, al menos de la provincia malagueña. Así debe pensar el prolifico autor de árboles y otras telarañas flamencas don Faustino Núñez, quien en su popular Flamencópolis califica como rondeña malagueña a este cante de Jacinto Almadén.
Lleva razón el profesor Núñez, pero ¿de qué lugar exacto dentro de la provincia malagueña? Pues miren, hay un barrio en la capital costasoleña que se construyó en el lado no habitado del río Guadalmedina y que hoy se encuentra totalmente integrado con el núcleo principal de la ciudad. Me refiero al popular Barrio del Perchel, del que colocamos una vieja foto a nuestra derecha.
- Y ¿quién dice que ese fandango sea del Perchel?
me preguntarán enseguida los amantes del "todo documentado", hartos ya de haber padecido durante décadas y décadas a toda suerte de "flamencólicos de inspiración".
Almadén grabó mucho entre 1958 y 1964. Mucho y muy desconocido. Concretamente en 1960 hizo un disco de larga duración acompañado en seis cantes por Justo de Badajoz y en otros seis por Antonio Arenas. Vean en el contenido del disco que pongo a mi izquierda que aparecen unos Fandangos del Perchel acompañados por Justo de Badajoz. Los escuchamos y yo me despido de ustedes hasta otra.
- Y ¿quién dice que ese fandango sea del Perchel?
me preguntarán enseguida los amantes del "todo documentado", hartos ya de haber padecido durante décadas y décadas a toda suerte de "flamencólicos de inspiración".
Almadén grabó mucho entre 1958 y 1964. Mucho y muy desconocido. Concretamente en 1960 hizo un disco de larga duración acompañado en seis cantes por Justo de Badajoz y en otros seis por Antonio Arenas. Vean en el contenido del disco que pongo a mi izquierda que aparecen unos Fandangos del Perchel acompañados por Justo de Badajoz. Los escuchamos y yo me despido de ustedes hasta otra.
(*) Me refiero a los siguientes enlaces
20 de abril de 2015, ¿Rondeñas de Ronda?, (I)
23 de abril de 2015, ¿Rondeñas de Ronda?, (II)
20 de abril de 2015, ¿Rondeñas de Ronda?, (I)
23 de abril de 2015, ¿Rondeñas de Ronda?, (II)
26 de abril de 2015, ¿Rondeñas de Ronda? (III)
29 de abril de 2015, ¿Rondeñas de Ronda? (IV)
Todos los días son buenos para aprender... Tan sencilla la explicación cuando alguien le da su verdadero orden a las ideas y a los sonidos. Gracias, amigo Andrés.
ResponderEliminarSoy un amante de los cantes de Malaga, gracias Andres. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, paisano.
ResponderEliminarGracias Andrés. Precioso fandango perchelero! 💃♥️
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