Para Rafael Mesa, "El Guerra", cantaor cordobés
Actualmente integrada en la ciudad (yo mismo vivo muy cerca de ella), la barriada de Las Margaritas se construyó hacia 1887, en la zona noroeste de Córdoba y extramuros de ésta, bordeando hacia el norte las vías del ferrocarril Madrid-Sevilla. Allí, por la proximidad del tren, se instalaron diversas industrias como la "Fundición Las Margaritas", que dio nombre al nuevo asentamiento, o la fábrica de aceites y jabones conocida como "El Chimeneón", en activo hasta cerca de 1970. Su población, eminentemente obrera, la formaban los trabajadores de estas industrias y sobre todo los "ferroviarios", los trabajadores del tren.
Frente al Campo de la Verdad, la Judería, San Basilio, Santiago, San Lorenzo, San Pedro, San Andrés, Santa Marina, Centro, etcétera, Las Margaritas carecía de historia e incluso de fiestas propias como ocurría con las barriadas tradicionales.
Así fue hasta 1923, en cuyo año el concejal don José López de la Manzanera, junto al presidente en Córdoba de la sección de Ferrocarriles, don Manuel Villar Rodrigo, y junto a otros ferroviarios allí asentados, deciden organizar una verbena. Se celebraría entre los días 23 a 26 de agosto, Así se publica en el periódico La Voz de Córdoba el día 18 de agosto, según vemos más arriba, anunciando muchas actividades. Por ejemplo, se habla de una "Zambra gitana" y también (copio literalmente) de
Un estupendo concurso de cante "jondo", en el que tomarán parte afamados artistas.
El barrio de los de las vías no quería quedarse atrás de los otros donde rara era la verbena que no contaba con un concurso de cante. Dos días antes de la publicación de esta nota había tenido lugar el del barrio de San Basilio donde, aunque la crónica en prensa (aparecida el día 17) no lo dijera explícitamente, el ganador fue Pepe Marchena. Todo parece indicar que éste sería uno de los afamados artistas que ya se sabía (antes del anuncio en prensa de la verbena y con seguridad, dado lo ajustado de las fechas, de que se celebrara el concurso de San Basilio) que iban a participar en el novedoso certamen de Las Margaritas, como efectivamente así fue, pero de ello hablaremos en otra entrada.
No tenía en mente redactar este artículo y, ni mucho menos, poner un recorte de prensa simplemente por ponerlo o por pensar que ello suponga mérito alguno. Todo es más sencillo. Lo he redactado porque he leído en las redes que el concurso de Las Margaritas se montó improvisadamente para que, tras ganar Marchena en San Basilio, se celebrara otro donde resultara perdedor. Esto me suena a pura fantasía. Vamos, que no hay quien se imagine a los obreros ferroviarios metidos en un contubernio anti-cante-bonito queriendo humillar a su ariete Niño de Marchena. Más: no creo que tal contubernio existiera. Marchena era apreciado en Córdoba desde 1917 y había sido agasajado con fiestas en 1920. Ocurrió que la noche de Las Margaritas hubo otro que cantó mejor y tuvo que conformarse con un segundo premio. Y nada más.
Paisano, ¿quién es el cabra loca que dice esas bobadas? Aparte de que materialmente fuese imposible, según se deduce de los datos que nos das, organizar un concurso con tal intención, menudo y fino que era el de Marchena. De haber sido así, eso se habría sabido (como por ejemplo se supo en Córdoba que los aspirantes a la Llave de Oro de 1962 iban todos condenados a perder, salvo Antonio Mairena) y Marchena habría dado el plantón. Digo yo.
ResponderEliminarAriza el de F. N.
Y llevas razón Ariza, el sagaz Niño de Marchena cuando venía de codearse con Chacón, Manuel Torre, El Gloria y otros en la plaza de toros de Huelva, cuando estaba en fase claramente ascendente, jamás se habría prestado al juego de ofrecerse como "cordero a degollar". En cuanto al autor de esas insinuaciones, indaga en las redes. Yo no digo el nombre para respetar la máxima proclamada por él mismo en su ciber-ámbito: "Se dice el pecado, no el pecador". Gracias, paisano y no dejes de escribirme que últimamente me tienes un poco olvidado.
EliminarMe encantan estas historias de trenes, de andenes y vías, de tránsito y humos, de agujas y guardagujas (que luego dan enormes Agujetas, padre e hijo); del Rápido y El Expreso, con Córdoba en el medio para equilibrio de meridionales sures y nortes tras la Sierra. Muy bonita la historia. Intrascendente si gano fulano o zutano. Un abrazo, Andrés.
ResponderEliminarGracias, Javier. La crónica del concurso, que publicaré íntegra más adelante, seguro que te va a gustar. Un abrazo
EliminarYa he localizado al lenguaraz ese. Lo he visto como comentarista en una de tus anteriores entradas. Por cierto que cuando entra a comentar se hace llamar "El Anfitrión", como si él fuese el dueño único de todo el ciberflamenco. En su foro "El Flamenco y su Cultura" y dirigiéndose a ti, veo que escribe esto:
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Eso lo organizaron dos tenientes de alcalde, políticos de mierda como los demás de este país. Ya vale de esconderse en el pueblo llano, fue un montaje precipitado que se aseguró la asistencia de gente repartiendo "una abundante comida para los pobres" y anunciando "bellísimas señoritas". Todo transcurrió disimuladamente hasta que le dieron el premio a un paquete, que no hacía "Cante Jondo" sino que era el típico representante del ridículo flamenquismo que se había deunciado en Granada. Por eso hay que pensar que fue un montaje y que sí había un contubernio porque la prensa no dio el nombre del ganador cuando ganó el Niño de Marchena y sí lo dio cuando se lo dieron a otro.
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Digo yo que estos dos tenientes de alcalde que montan el pretendido "contubernio olivarero" debían de ser el colmo de la eficacia y de la celeridad. En menos de 24 horas convencen al jefe de los ferrocarriles, señor Villar Rodrigo, y a los ferroviarios de a pie para programar una verbena de cuatro días, para organizar una comida de caridad, para montar una tómbola, contratar a una zambra gitana, alumbrado extraordinario, cucañas y fuegos de artificio, comprometer a las bandas de música municipal y del regimiento de infantería, prever una flota de autobuses para llevar a los cordobeses de otros barrios con precio ya concertado. Estos dos hombres, repito que en 24 horas, hasta contagiaron su entusiasmo a las gentes sencillas de la barriada que desde el mismo día del anuncio de la verbena ya estaban dispuestos a engalanar sus casas. Estos dos señores habrían convencido, en menos de 24 horas, insisto, a Marchena y a otros "afamados cantaores" para participar en un concurso de cante. Y todo ¿para qué? Para que otro de los famosos, eso sí "cantaor paquete", ganase a Marchena y lavase la mancha que el Niño de Marchena había dejado con su triunfo en San Basilio dos días antes. Hasta tenían comprada a la prensa para que esta vez sí dieran el nombre del ganador.
Como puede deducir cualquiera que lea a este Olivo, su capacidad de fabulación no tiene límites. Como novelista, este tío no sería un olivo, valdría él solo más que todos los olivos juntos de Bujalance, de Baena, de Priego...
Ariza de F. N.
En las fechas en las que estamos, 18 de Agosto de 1923, no faltaba ni un mes para que se produjera un levantamiento militar contra -según decía el Manifiesto- "los profesionales de la política", se refería a las altas instancias naturalmente pero el decorado político era de corrupción institucional. Un Concurso de Cante Jondo que no lo organice una asociación de músicos, aficionados o intelectuales sino que lo montan políticos directamente, es una monumental cagada, le guste a Ariza o no. No merece tanta atención ya que se celebraron varios por esas fechas pero se conoce que a Raya le pone eso de que lo perdiera Marchena, le da morbo imaginarle vencido por otro que cantara mejor y a pesar de que las fechas de las noticias que maneja ilustran perfectamente lo que pasó, se dedica a estirarlas como si fueran chicle para que digan lo que no dicen. Vamos a esperar a ver esa cronica del acto que nos tienen prometida pero, por favor, sabemos leer, absténganse en la medida de lo posible de añadirle más consideraciones que las que traiga. Por mucho que se la ponga morcillona imaginar a un mirlo derrotado por un paquete de esos que tanto criticaron Falla y Lorca.
EliminarAllá mi amigo Andrés por no poner lectura previa a la publicación de los mensajes pero yo en su lugar eliminaría los que usen el lenguaje barriobajero del que cuentan que el Olivo es un maestro y del que ya usa en su último comentario. Vamos a dejarnos de gaitas y que el Anfitrión-Olivo explique cómo en menos de 24 horas los dos concejales cordobeses montaron todo el tinglado. Lo demás es palabrería hueca. ¿Qué tendrá que ver que un mes después hubiera un levantamiento militar?
EliminarAriza de F. N.
La victoria del Niño de Marchena en el II Concurso de Cante Jondo de Córdoba es muy significativa en la Historia del Flamenco. Caracol y el Tenazas rentabilizaron muy bien su paso por Granada, ambos prsumieron de haberlo ganado aunque en realidad no lo gano ninguno de los dos porque el premio de honor fue declarado desierto. Muy poco después -aquel mismo año- Córdoba celebra el suyo con los mismos planteamientos pero con la diferencia de que se permitía concursar a cantaores profesionales. La primera edición la ganó el Niño de la Rosa, pero parece ser que no grabó, por lo cual no podemos escuchar su estilo de cante para comprobar qué es lo que se entendía por Cante Jondo en Córdoba. El II Concurso lo ganó el Niño de Marchena con lo cual ya tenemos una idea exacta. El problema que tenía el Cante Jondo era político -que no se entera usted, Ariza- estaba missing desde el cierre gubernamental de los café-cantante, apartado de la fonografía por la política de los sellos discográficos y ostigado por el antiflamenquismo de la corriente política "regeneracionista" y la prensa corrupta que llevó a nuestro país a tocar fondo en lo socioeconómico. Se lo puede usted creer porque nos ha vuelto a pasar.
EliminarLa victoria del Niño de Marchena nos señala cual era para los cordobeses el Cante Jondo, el cante primitivo; para enturbiar ese rastro se organizaron diversas juergas donde la prensa llamaba Cante Jondo a lo que le daba la gana. El organizador DECIDE siempre qué es flamenco, qué es jondo o bien opta por confundirlos, haciéndolos sinónimos. Lo que sucede es que Raya considera a todos los organizadores gente honorable y autorizadísima en cante jondo («el concejal don José López de la Manzanera -dice- junto al presidente en Córdoba de la sección de Ferrocarriles, don Manuel Villar Rodrigo, junto a otros ferroviarios allí asentados, deciden organizar una verbena...») pues que sepas que 15 días después hubo un cambio de tortilla debida a la elevadísima corrupción política. Que sepas que lo que anunciaron a toda prisa no se corresponde con lo que finalmente hubo. Y que nada de lo que sucedió en esa costillada debe hacernos olvidar la victoria del Niño de Marchena en el II Concurso de Cante Jondo de Córdoba, celebrado en el Alcazar Viejo, que estuvo organizado por un cantaor (Milena) que acusó a Chacón de desleal con el gremio de profesionales y un cronista confiable (Julifer). Y que a muchos aficionados se les llena la boca hablando de Falla y Lorca pero luego confunden lo flamenco con lo jondo como el más torpe de los gacetilleros.
Este Olivo se ve que no sabe ni leer. Dice:"Que sepas que lo que anunciaron a toda prisa no se corresponde con lo que finalmente hubo", ¿De dónde sale eso? ¿Del recorte que hoy recoge Andrés Raya referido a las actividades en el día 25 y a las que se habrían de celebrar al día siguiente? La verbena ya llevaba dos días anteriores de actividad. Si la afirmación del Olivo de que todo fue montado para propinarle una derrota a Marchena fuese cierta, que explique de una vez por todas cómo fue posible armar todo ese tinglado en menos de 24 horas. La cosa es tan clara que escriba lo que escriba, si es que lo hace, este pretendido Anfitrión, yo no pienso caer en el juego de contestarle a nada más.
EliminarAriza
¿Pero qué tingaldo ni qué tinglado? En 24 horas lo que hicieron fue redactar el anuncia, son cosas que tenían por la mano, le ordenan a la brigadilla "cuando retires la iluminación en San Basilio, la colocas en Las Margaritas". Le ordenan a la banda "tal día en tal sitio" y ellos para allá que es un servicio municipal. Lo más complicado es montar un partido de futbol y cuando anunciaron la verbena ni siquiera sabían que se iba a jugar uno. La tómbola la anunciaron y como falló, rifaron un mantón. Y el propio anuncio era la convocatoria del concurso, el que lo leyó se apuntó. Qué tinglado van a montar un teniente de alcalde, un concejal y un periodista que entre los tres no pegan un palo al agua, el mérito, de la brigadilla que se lo curró en el tiempo que había. Todavía está por ver si fue para deslucir el reciente triunfo de Marchena -que no sabemos nada positivamente- o fue solo para poder liar la madeja y pontificar sobre cante jondo y poner las bases que les dio la gana y premiar a quien quisieron... porque yo lo valgo. No merece la pena discutir por una costillada sin transcendencia.
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