(Recupero unas líneas que escribí el 22 de diciembre de 1979 a raíz de la publicación, unos meses antes, del disco “La leyenda del tiempo” de Camarón de la Isla. Un poquito atrevidas para aquel momento, pero el paso de los años creo que me ha dado la razón en mis apreciaciones...)
Delicias, encantos de un verdadero flamenco...
¡Pobres de los puristas! Dicen que por estas canciones han excomulgado a CAMARON. A Camarón, el Camaroncillo frágil, tenue, el tierno Camarón. ¡Pobres de los puristas! Ellos se lo pierden.
Pierden, sí, las delicias, el encanto de un verdadero flamenco. Pierden la voz más genuínamente andaluza desde que nos abandonó (Dios, ¿por qué nos los vas arrebatando?) el de la voz de enhebro, el Caracol (Manuel Ortega). Pierden la moruna guitarra de esa plantita madura que se autodice Tomatito. Pierden el sitar de Gualberto (¡qué hermosura de nanas!), las vocecillas de Manoli, las delicadas palmas de Bollito...
Porque, vamos a ver, ¿quién se atreve a decir que el flamenco está terminado, que es construcción acabada?, ¿cómo es que dicen que Morente, que Lebrijano, que Camarón dejan de ser flamencos cuando, según ellos, rompen el molde e intercalan otros elementos musicales?
Sí, para su desgracia, esos llorones existen: son los impenitentes mairenistas (su maestro lo dijo: “el cante está hecho”), los seguidores de la frialdad aflamencada, o, mejor, el flamenco en frío. “Esto es así porque así lo cantó fulanillo y porque a mí la incorpórea razón me lo dictó”. ¡Qué sinrazón eso de la incorpórea razón!
Este disco, por el contrario, tiene cuerpo de razón y razón con cuerpo. Obra colectiva de, imagino yo, unos cuantos pasaos, con su estelar figura, sí, pero colectiva creación: venenos, bollitos, pachones, manolis, tomatitos, lorcas y villalones resucitados, coral griega con un camaroncillo de portavoz. Andaluza, flamenca creación viva...
Sobremanera me ha impresionado esa “nana”. ¡Ay si algún que otro mairenista que yo me sé hubiese conseguido en toda su vida la mitad de este cante!
Camarón, niño Monge, ¡gracias por este regalillo!
Han pasado los años y la tecnología ha cambiado una barbaridad. Ahora, puedo poner a disposición de ustedes la "Nana del Caballo Grande". Oíganla quienes no la conozcan...
Ahora que lo dices, dejo tu blog para otro momento, busco el disco de Camarón y me voy a escuchar esa nana.
ResponderEliminarHasta pronto.
¿Ya la has escuchado, Porverita? Está claro que el "molde" es el de Bernardo de los Lobitos en la Antología de Hispavox, pero Camarón debió de tomarlo de la versión de Morente en sus "Nanas de la cebolla" de Miguel Hernández. Jondura in crescendo...
ResponderEliminarOleeeee los que saben. José escuchaba mucho a Enrique, y pasaron mucho tiempo juntos. Y hay que decirlo bien fuerte.... José se inspiró y siguió mucho a su amigo Morente y con él y a través de el, a Lobitos y otros grandes. Gracias.
ResponderEliminarLaSal, llevas razón. La nana de Bernardo estaba aún en una fase de canto folklórico aflamencado. Como le comentaba a Porverita, con Morente y con el Niño Monge, adquirió grandeza flamenca.
ResponderEliminarHermosas palabras, sí señor. Y de actualidad a pesar del tiempo... Ese tiempo que he hecho que bastantes de aquellos puristas se hayan "reciclado"... Y los que no, como tú bien dices, ellos se lo pierden
ResponderEliminarY como dijo aquel ..."A quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga"...
Camarón siempre será lo que fué :"Un genio, un auténtico flamenco"...
ResponderEliminarDe acuerdo en todo. Escuché las nanas de Camarón, pero hace tanto tiempo que... Ahora tengo que buscar las de Morente y las de Bernardo.
ResponderEliminarSiempre he deseado que el de Los Lobitos fuera mi abuelo -o padre, a quien perdí muy pronto- y me cantara esas nanas.
¡Vaya tres ejemplos tan ejemplares!
¿Tú sabes mucho? ¿eh?
Pues me alegro y te lo agradezco, que lo compartas con nosotros sin petulancia.
Salud.
Andrés, en 1979 tuviste visión de futuro. Qué penita, ¿verdad?, que Camarón se fuera antes de tiempo.
ResponderEliminarCamarón se nos fue el 2 de julio de 1992. Ahora, veinte años después, yo hasta dudo de que Camarón existiera. ¿No sería un destello de la Divinidad que anduvo entre nosotros durante 42 años sin que fuera humano?
EliminarEstas nanas son inmortales. Gracias por recordármelas!!!!
ResponderEliminarTú lo has dicho: "son inmortales". Gracias a ti por tener la paciencia de leerme.
EliminarHola a todos y aunque esto de es hace bastante tiempo, me gustaría hacer un pequeño comentario. Cuando un aficionado al flamenco escucha algo relacionado con el mismo, ya sea puro, o moderno, no se debe dejar llevar por los "imbisibles canones flamencos" establecidos anteriormente. Simplemente poner la canción, cerrar los ojos y escuchar. No busquen comparaciones, no quieran llevarlo al terreno de algo ya establecido, solo escuchen, la propia canción toma forma dentro de nosotros y sabremos al instante si es bueno a no, o si nos gusta o no. Porque compararla con algo anterior. El timepo se para cada vez que unas letras nos ponen el pelo de punta, en ese "gratificante" momento nuestro subocnsciente no sabe quien canta, ni quien toca, solo disfruta.
ResponderEliminarDespués de muchos años escuchando infinidad de cantantes antiguos y modernos, además muchas veces, tanto propesionales como aficionados, yo siempre vuelvo a Camarón......
Gracias, Raúl, por intervenir. Creo que estamos de acuerdo en la vigencia de Camarón.
Eliminar¡Ole esas nanas! ¡Ole ese Camarón! cuando gracias a Lorca empecé a escuchar flamenco (no vivo ni en Andalucía, ni en España, ni en Europa) luego de la Niña de los Peines, a quien primero escuché fue a Camarón de la Isla, y no pude tener mejor introducción, ni más completa. ¡Que pena que un genio tan grandioso como Mairena, haya resbalado hasta caer en la insensibilidad a veces que crece en el mairenismo! pero aun así Mairena demuestra que es un genio, a su razón le llamó incorpórea, sin cuerpo, sin pies, sin cabeza, sin explicación lógica y demostrable... Gracias por este blog, Andrés. Un saludo.
ResponderEliminarGracias por la visita. Saludos.
EliminarEn el 2.000, por motivos de trabajo en una cia. de teatro, que llevaba, entre otras, dos obras de Poesía y Flamenco, fue como me introduje en el mundillo del Flamenco. Lo primero que cayó en mis manos fue una copia de cinta de Bernardo de los Lobitos,Carmen Linares y Miguel Poveda. El dueño, coreógrafo, escritor y actor (entre otras cosas), viendo que me gustaba, empezó a darme cintas de cassette de Enrique Morente. Las escuché todas (el había trabajado con él)y llegó un momento en que no me atraía ciertas cosas. Ahí me dí cuenta de lo que me gustaba. Por tanto a Morente, sin conocerle, le agradezco que me dijera a través de su Cante lo tenía que elegir.Los primeros tres CDs. que compré fueron de Don Antonio Chacón (peazo de homenaje que le hace Morente), Tomás Pavón y Manuel Torres. Cada vez que escuchaba a uno me iba al Granaino. Una vez llegué a Antonio Mairena, escucho a alguien que para la historia ha cuadrao los Cantes (siempre en mi opinión) y sin prisa empiezo a escuchar las Soleares y Seguiriyas (facilitadas por un amigo). Hoy en día y mañana y pasado mañana, Mairena será un referente para much@s. Nunca he sido mairenista ni lo voy a ser pero me molesta mucho los "istas". ¿De verdad cree alguien que Morente y Mairena o Mairena y Camarón se llevaban mal, no se respetaban? ¿No sería un invento de esos que querían tener su protagonismo particular?. Cada vez que escucho o leo algo referente a estos cantaores y a otros, con desprecio hacia el compañero, me entran náuseas. Solo hay un Flamenco y aficionados con gustos diferentes y además, nadie está en posesión de la verdad, ni aunque se demuestre con documentos, pues pueden haber otros anteriores. Escucho a tod@s y elijo a quién más me parece.¿Elijo bien?, siempre tengo dudas. Observo que hay much@s que nunca las tienen. Pues bien, en esto que les voy a decir no hay trampas ni cartón. Cuando hago unas seguiriyas, me tengo que pelear conmigo mismo, metiéndome en mis adentros, olvidándome de que existe el mundo. Y si hay alguien que me lo rebata, lo digo tal como lo siento: MIENTE, porque jamás se habrá expresado por Seguiriyas.Los consejos los aceptos de los humildes y los bondadosos y de los que no se la dan de nada. El Flamenco es muy amplio y hay donde escoger para todos.Esto es una simple opinión de un "no entendido" y que con sus errores trata de ser honrado consigo mismo.
ResponderEliminarMuy bien, amigo Paco. Una sola cosa y es referida al uso de los "istas". Madridistas son los partidarios y defensores del Real Madrid, mairenistas son los partidarios y defensores de Antonio Mairena. Lo que no hay que confundir es a los partidarios de alguien con el propio personaje. Quiero decir que criticar ciertas posturas mairenistas no significa en absoluto hacerlo de la figura de don Antonio Mairena.
EliminarInteresantísimo Andrés;yo tenía 12 años cuando salió "la leyenda.." Y compré un cassette donde no venía el disco entero,hasta que años después compré el LP.Lo que me llamó más la atención en esos años fué la nana,las alegrías y los tangos de la sultana.Hoy es un disco que reescucho a veces con nostalgia
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