A partir de la gran aceptación recibida por la de Ducretet-Thomson-Hispavox a mediados de los años cincuenta, las llamadas Antologías Flamencas se pusieron de moda. Muchas colectivas, otras de artista único. No vamos a nombrarlas porque están en la memoria de todo buen aficionado. Pero he aquí que en el año 1977 adquiero dos discos lepés con títulos
Llevan el sello de Gramusic, con licencia de Ariola Eurodisc, y fueron producidos por J. M. Caballero Bonald. Curioso que en ambos casos se hable de "volumen 2". Ignoro si existieron unos "volumen 1", como también ignoro si, junto a Seguiryas y Soleares, se editaron otros discos para hacer antologías de otros estilos de cante. A mí me bastó con la escucha de estos vinilos para perder todo interés en este tema.
Porque, vamos a aclararnos, yo doy por entendío que la palabra antología viene a significar una selección de obras dentro de un determinado género artístico. También cabe suponer que en toda antología se quiera mostrar lo mejor del género aludido, al menos bajo criterio del antólogo. Ideas que me chocan frontalmente con el contenido de los dos discos aludidos. No es que no encontremos lo mejor dentro de las seguiriyas o de las soleares, es que nos encontramos con algún que otro registro de auténtica pena.
En fin, puestos a destacar, salvaría las seguiriyas de la Piriñaca y alguna más. En las soleares hay más calidad, aunque relativa (El Borrico, Joselero o Manolito María), o sin relativismo alguno cuando oímos a la reina doña Fernanda de Utrera:
Antología de las Soleares, Vol. 2
Llevan el sello de Gramusic, con licencia de Ariola Eurodisc, y fueron producidos por J. M. Caballero Bonald. Curioso que en ambos casos se hable de "volumen 2". Ignoro si existieron unos "volumen 1", como también ignoro si, junto a Seguiryas y Soleares, se editaron otros discos para hacer antologías de otros estilos de cante. A mí me bastó con la escucha de estos vinilos para perder todo interés en este tema.
Porque, vamos a aclararnos, yo doy por entendío que la palabra antología viene a significar una selección de obras dentro de un determinado género artístico. También cabe suponer que en toda antología se quiera mostrar lo mejor del género aludido, al menos bajo criterio del antólogo. Ideas que me chocan frontalmente con el contenido de los dos discos aludidos. No es que no encontremos lo mejor dentro de las seguiriyas o de las soleares, es que nos encontramos con algún que otro registro de auténtica pena.
En fin, puestos a destacar, salvaría las seguiriyas de la Piriñaca y alguna más. En las soleares hay más calidad, aunque relativa (El Borrico, Joselero o Manolito María), o sin relativismo alguno cuando oímos a la reina doña Fernanda de Utrera:
El nombre del escritor Caballero Bonald me recordó enseguida aquella colección de discos publicada bajo el nombre de Archivo del Cante Flamenco. Efectivamente muchas de las grabaciones incluidas en estas antologías ya habían aparecido en el Archivo. Las que no, cabe suponer que se grabaron por esas mismas fechas pero quedaron como "material de sobra" que más adelante quisieron aprovechar. Pues vaya que usted, don José Manuel Caballero, hombre de tantas letras, hombre tan importante en el mundo de las letras, aquí dio un buen patinazo.
Estimado amigo: ha llegado a mis manos un ejemplar de "Una historia del cante flamenco" de Manolo Caracol" Dos vinilos y libreto en estado de conservación "NUEVO". Mi pregunta es ¿qué valor económico puede tener esta joya del flamenco. Es de Hispavox de 1958. Gracias
ResponderEliminarYa le he contestado en otro sitio del blog. Saludos
EliminarEstimado amigo: Soy MIguel Ángel Domínguez otra vez. Mi correo electrónico es miguelaf72@hotmail.com. Muchas Gracias por anticipado. Me parece que este patrimonio que es el Flamenco debe difundirse. Lo hacéis genial.Enhorabuena.
ResponderEliminar